STABILIZING NEW SKIN CHALLENGE

Equilibra: controla el exceso de grasa y matifica desde la primera aplicación.
Purifica: ayuda a prevenir imperfecciones y limpia los poros en profundidad.
Afina la textura: minimiza la apariencia de poros y mejora visiblemente la piel.
Respeta la piel: cuida y refuerza la barrera cutánea gracias a su fórmula respetuosa con la microbiota.
Textura ligera: Ideal para uso diario en pieles mixtas, grasas o con tendencia acneica.

Usa la Foaming Net para transformar tu limpiador en una espuma rica y suave que maximiza la limpieza sin resecar.
Completa la rutina con el sérum Stabilizing Purifying Concentrate para un efecto triple acción sobre imperfecciones, texturas y brillos

Mañana y noche:
Paso 1: limpia con Stabilizing Cleansing Mask. Aplica sobre el rostro húmedo y utiliza el Foaming Net para generar espuma.
Paso 2: Aplica la esencia Stabilizing Resurfacing Essence en zonas específicas o en todo el rostro.
Paso 3: Hidrata con Stabilizing Oil-Free Gel Cream tras tu sérum habitual.

Una vez por semana:
Usa Stabilizing Cleansing Mask como mascarilla. Extiende una capa uniforme, deja actuar 5-10 minutos y aclara con agua tibia.

Pieles grasas, mixtas o con tendencia a imperfecciones.
Cutis con exceso de brillo, poros dilatados o textura irregular.
Pieles que necesitan una rutina de purificación sin sensación de tirantez ni sequedad.
Personas que buscan una rutina fácil, efectiva y visible en solo 28 días.

Ácido Salicílico: activo exfoliante y purificante que ayuda a limpiar los poros y prevenir los granitos.
Extracto de Sauce Blanco: acción antibacteriana y antiinflamatoria natural.
Niacinamida: regula la producción de sebo, mejora el tono y refuerza la barrera cutánea.
Prebióticos: ayudan a mantener una microbiota equilibrada, clave para prevenir brotes e imperfecciones.
Textura Oil-free: aporta hidratación sin peso, ideal para climas cálidos o pieles grasas.